Entrar a Villa del Dique por su callecita principal da cuenta de la calidez y la energía del lugar.
Te obliga a correr el pie del acelerador (y no hablamos solo de autos) y alentar la marcha, mientras te vigila el cerro de La Cruz y te recuerda en qué año estamos, especialmente diseñado para los viajeros del tiempo que se encuentren un poco perdidos.
Villa del Dique, otra de las bellezas del Valle de Calamuchita cuenta con costas al lago más grande de la provincia de Córdoba, que comparte con tantas otras ciudades y comunas.
Es maravilloso recorrer sus costas desde el camping municipal hasta sus barrios más alejados como Embalsina o La Sierrita.
Nos gusta caminar por el sendero de los hoteles abandonados y disfrutar de las huellas de otros tiempos en sus edificaciones agrietadas y sobresaltadas por la hermosa vegetación local.
También emprender en bici o auto el viejo camino a La Sierrita donde contemplar lomadas, campos y tunales.
Villa del Dique nos ofrece algunas propuestas de desayunos, meriendas, almuerzos y cenas que vale la pena probar sin pensar en la dieta. Incluso acompañar con alguna cervecita artesanal de montaña “made in VDD”.
Casera, familiar y calma es cada experiencia en nuestra querida Villa.
Venite y disfrutala como nosotros.
Límite entre Villa del Dique y Villa Rumipal